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Hoy en día los gabinetes de tarot no son como hace años. Ya no existen grandes salas donde las tarotistas comparten espacio con decenas de compañeras. Ahora realizan su trabajo desde la tranquilidad de su despacho, oficina, etc.
La consulta en gabinete ha resuelto muchas dudas durante la pasada pandemia por COVID, algo que se ha agradecido y mucho.
Seguro que en estos tiempos que corren, donde hay grandes incertidumbres que se ciernen sobe el horizonte, además de las posibles inquietudes que están ocurriendo en tu día a día, hace que te plantees buscar alguna ayuda para escoger el camino más adecuado, tomar la decisión más correcta, o saber qué decir en el momento más adecuado. Esa ayuda, en muchas ocasiones, ha llegado a otras personas gracias al Tarot. Una herramienta que ha sido de mucha utilidad y que, a pesar de vivir en los tiempos que vivimos, donde el conocimiento del ser humano está llegando a momentos que hace una década no se pensaban, sigue siendo un oráculo en el que apoyarnos.
Pero, la duda que siempre surge es: ¿voy a un profesional que lo hace en su casa, o llamo a un gabinete? En este artículo trataremos de darte puntos de vista sobre la consulta a través de este último medio, además de ofrecerte los argumentos por los cuales lo defendemos. Empecemos.
¿Qué me voy a encontrar? En primer lugar, un equipo de personas que están formados para ayudarte a resolver cualquier duda que tengas. Al tener más opciones, también puedes elegir a la persona, e incluso contrastar con otros profesionales lo que te ha comentado uno/a de ellos/as. Por lo tanto, la oferta ya de entrada es muy atractiva. De otro modo, tendrías que conformarte con lo que te dijera un sólo profesional, o tener que tomarte otro momento de los días venideros para acudir a otra consulta.
¿Es seguro el pago? Totalmente. Hasta el momento, hay gabinetes en todo nuestro territorio que llevan ya décadas prestando servicio con la máxima fiabilidad y compromiso de calidad, además de respeto a la seguridad de los datos, y respondiendo ante cualquier incidencia en el pago. En la actualidad hay muchas personas que suelen aceptar pagos por el sistema conocido como “Bizum”, pero la cantidad de fraudes detectados y que no son posible reclamar ante la pequeña cuantía que supone, hace que este método sea poco recomendable. Los gabinetes cuentan con un equipo de teleoperadores a los cuales siempre puedes consultar tus dudas sobre la seguridad en pagos y datos.
¿Son Tarotistas de fiar? Este tipo de servicios sólo persiguen un objetivo: prestar continuamente un servicio de calidad. Para ellos, la premisa es clara: están de cara a un cliente el cual necesita ayuda. Y es que no hay mejor manera de llegar a la excelencia que a través de la mejora del producto o servicio, algo que realizan constantemente, mediante sistemas internos de control de calidad. No cabe duda que todo comienza por un gran plan de recursos humanos. La elección de los profesionales que van a ejercer su servicio está sujeta cada vez a más controles, y es más exigente.
¿Son profesionales con experiencia? De eso no cabe la menor duda. Y tiene su razón. Los profesionales que trabajan ahí lo hacen recibiendo a muchos clientes diariamente. Eso hace que la práctica sea cada vez mayor, y por tanto, la lectura de la baraja así como las percepciones que tienen son cada vez más precisas. El entrenamiento mental se ha mostrado como una de las concisiones para mantener activas nuestras cualidades, así que si eso lo trasladamos a una actividad como el Tarot, asegura que cada vez las lecturas son más precisas.
¿Y qué pasa con la vigencia? Bueno, más bien, clarividencia. Como lo anterior, claro que se desarrolla con el ejercicio del Tarot. Esta herramienta, sus formas colores y símbolos hacen que el cerebro desarrolle esa facultad de manera ordenada y precisa. Pero el buen Tarotista no deja la baraja de lado para “hacerlo sin cartas”. Es una falacia muy extendida, la cual parece como cuando en el circo se decía aquello de “el más difícil todavía”. Todos los trabajos requieren de herramientas para su realización, y una consulta de Tarot no iba a ser menos.
Hay muchos argumentos más que te podríamos ofrecer, pero creemos que estos son los más destacados. Así que si necesitas una ayuda en este momento de tu vida donde no ves claro qué hacer o cómo hacerlo, confía en los profesionales del Tarot, y consulta en algún gabinete. ¡Ah, por cierto! A la hora que quieras y desde el lugar que quieras, sin tener que desplazarte.
